¿Quiénes somos?

La fundación Brazos de Dios, es un proyecto que surge con el fin de formar la vida de los niños y niñas, para así transformarla mediante procesos socioeducativos que contribuyan al fortalecimiento de los aspectos de su vida educativa, social y familiar. Este pretende lograr un mejor aprovechamiento del tiempo libre, posibilitando el trabajo de manera mancomunada con el núcleo familiar y contexto social. Articulando así las redes de apoyo existentes tales como: pedagogía, psicología, odontología, nutricionista, entre otras especialidades que se requieran a favor del bienestar de las personas involucradas, aportando así en el excelente desarrollo del crecimiento intelectual, moral y espiritual en sus vidas, donde la intervención es abordada bajo el método de trabajo en equipo, que permite a través de procesos grupales el crecimiento personal, social y orientación del proyecto de vida de   los niños y niñas a los que va dirigido el programa. 

¿Porqué se crea la Fundación Brazos de Dios?

El nivel de pobreza en Colombia se hace cada día más evidente, especialmente desde la llegada del coronavirus, con desempleo, cierre de microempresas, trabajos no formales, etc. abarcando así un gran porcentaje de la población quienes, a su vez, tienen unas condiciones de vida muy precarias, viviendo en invasiones, a orillas de ríos, casas multifamiliares entre otros; lo que incrementa la explotación y abuso infantil, drogadicción, violencia intrafamiliar, prostitución, etc. Afectando el desarrollo integral de los niños y jóvenes, vulnerando sus derechos fundamentales.

A causa de estos flagelos y necesidades de la sociedad, la Fundación Brazos de Dios, desea aportar con el apoyo de profesionales con propósito de ayudar de manera solidaria a los niños y niñas de la comuna 4  que viven día a día diferentes problemáticas, enfrentando tentaciones e incitación a la drogadicción y delincuencia, a esto se suman las influencias de las redes sociales teniendo en cuenta que los niños y los jóvenes tienen acceso a todo tipo de información debido a la ausencia de sus padres, el sector es escenario de múltiples flagelos; ocasionando así,  que los chicos crezcan con dificultades en la interacción social, desacato de normas de convivencia, vandalismo, delincuencia, expendio y receptación de drogas, entre otros. Dando como resultado bajo rendimiento académico, falta de empatía, individualismo o problemas para cooperar positivamente en la sociedad.

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